Lo bueno de vivir en esta "Aldea" como diría mi amiga Betzabe, es que todos nos conocemos, cuando una de mis pulgas me dice que va para la casa de fulana generalmente se de quien es hija, quienes son sus tíos, sus abuelos y una amplia parte de su árbol genealógico.

 

Hace días hablaba con alguien sobre un tema y me dice: - antes yo opinaba mucho sobre la homosexualidad pero ahora que me toca vivirlo de tan cerca, prefiero quedarme callado, no puedo criticar ni juzgar a nadie.

 

Realmente nunca escuche a esa persona hablar en todo despectivo sobre ese tema en particular, pero ahora que lo esta viviendo ha sentido que es lealtad hacia los suyos tomar una posición mas respetuosa. -Lo veo bien, le dije, pero recuerda que aquí todos tenemos una colita que nos pisen, en este pueblo nadie puede hablar a boca llena de nadie.

 

Y escuchar a las personas degollando a su prójimo, sin nada de pena ni nada de moral, sin pensar en los suyos es tema diario.

 

Señores me agrada recordarles que en todas las familias hay: una vagabunda, un maricon, una que salió preña, un mala paga, uno que estuvo en la cárcel, una cuernua, uno que embargaron, un tecato, uno que se emborracha y hace shows, enemigos en las familias, una que priva en seria y acaba con medio pueblo, uno que atiborra la mujer a galletas y una que lo aguanta, un par de abortos, un aberrado sexual, una chapiadora, un viejo verde que busca menores, una que se metió con el marido ajeno, uno que mataron por andar haciendo de las suyas, un vago, fortunas mal habidas, un hijo en la calle, un romance con el entrenador, un narco, un político inmoral, uno que se metió a religioso pa enfriarse, un tumbador, uno que dio un braguetazo y vive a costilla de la mujer (un mantenío) y mil cosas mas que me llegan a la mente.

 

Tenemos dos opciones; o nos quedamos callados y somos mas tolerantes con los errores de los demás o seguimos en este tornado, dejamos que el embudo se lleve todo y al final nos destripamos unos con otros porque asumimos que todos hacemos lo mismo.

 

Al final de esto lo mas importante es que recordemos que todos nos conocemos y todos tenemos que contar y me indigna como algunos hacen las historias ajenas entre risas. Lo mejor del caso es que a veces tratan de tapar el sol con un dedo y ver la paja en el ojo ajeno, sin saber que quien te escucha hablar sabe el cuento de tu primo Perencejo, el que frecuentaba el bajo mundo, vestido de mujer.

Moraleja/consejo que no me han pedido: Si no vas a decir nada constructivo mejor cállate, si vas a decir algo que no sea bueno, si vas a criticar, si no quieres que tus hijos se junten con el hijo de fulanito, si vas a dejar de contratar a alguien por un error del pasado, si vas a sacar los pecados del tatarabuelo, si vas a vomitar ofensas, piénsalo bien, muy bien. Puede ser que un día te digan: - pero y de que tu hablas si tu primo es...!!!!!

Y con esto damos la bienvenida a una nueva semana, sonríe por fe pero archiva las historias en tu disco duro, a veces tenemos que recordarlas para nuestra sanidad mental y sobre todo para la de nuestros hijos, que nadie les ponga un dedo acusador en la frente, todos tenemos una historia que contar y pecados que purgar y aunque lo mas justo es no tener que vivir con ellos a cuesta a veces los demás no te dejan pasar la pagina.

Que todo cuanto salga de tu boca sea para edificar o asume las consecuencias de tener un trozo de mierda en la suela de tus zapatos.